VTB, el segundo mayor banco de Rusia y uno de los primeros en ser excluidos del sistema global de pagos Swift, anunció este miércoles una pérdida de 7.700 millones de dólares en 2022 debido a las sanciones derivadas de la ofensiva rusa en Ucrania.

“En 2022, el grupo VTB afrontó dificultades y desafíos sin precedentes (…) Nos convertimos en el primer blanco del máximo de sanciones posibles, lo que causó pérdidas considerables”, lamentó Dmitri Pianov, director financiero de VTB, citado en un comunicado del grupo.

VTB anunció haber sufrido una pérdida de 612.600 millones de rublos, el equivalente de 7.700 millones de dólares al tipo de cambio actual, tras haber logrado un beneficio neto de 327.400 millones de rublos en 2021.

Las sanciones internacionales contra el sector bancario ruso afectaron de pleno a VTB, del que el Estado ruso es el accionista mayoritario, y que está especialmente presente en los mercados extranjeros.

VTB detalló el impacto de “la salida sin precedentes de liquidez en divisas”, las pérdidas debidas a las cesiones de filiales, y la subida de los tipos de interés del banco central ruso.

(Reuters)

En marzo de 2022, pocos días después del inicio de la intervención militar rusa en Ucrania, la Unión Europea excluyó a VTB del sistema de pagos internacionales Swift.

Su presidente, Andréi Kostin, en el cargo desde el año 2002, se vio además sancionado a título individual en Reino Unido y Estados Unidos.

En 2020, VTB tenía 15 millones de clientes en Rusia y empleaba a cerca de 80.000 personas.

Rusia busca tapar su deuda

Los servicios de Inteligencia de Reino Unido han señalado que Rusia podría buscar emitir deuda externa para “tapar huecos” en las finanzas del país de cara a “una larga guerra en Ucrania”, después de que el primer ministro ruso, Mijail Mishustin, desvelara un plan al respecto.

“Las autoridades rusas consideran probablemente la emisión de deuda externa como una vía para tapar huecos en las finanzas de Rusia mientras planifican una larga guerra en Ucrania. Sin embargo, sigue sin estar claro si Rusia tendrá éxito a la hora de aplicar estas medidas”, han sostenido.

Así, han recordado que Mishustin confirmó el 28 de marzo que Moscú estaba “desarrollando” un plan para “emitir parte de la deuda soberana de Rusia en divisas extranjeras” y ha explicado que “es casi seguramente una indicación de que Rusia anticipa apoyo financiero externo de países que considera ‘amistosos’”.

“Una vez esto sea completado, los inversores de otros países podrán comprar deuda soberana rusa y financiar parte de los déficits presupuestarios a futuro de Rusia. Estos inversores estarían financiando de forma indirecta la invasión rusa de Ucrania”, han manifestado, según una serie de mensajes publicados por el Ministerio de Defensa británico a través de su cuenta en la red social Twitter.

En este sentido, han subrayado que “durante los últimos meses, los bancos rusos han sido las principales entidades que compraban deuda estatal” y han añadido que “sin embargo, es improbable que tengan la capacidad de financiar totalmente los anticipados déficits de los futuros Presupuestos”.

(Con información de AFP y Europa Press)